En la silueta de tu cuerpo me perdí.
En ese…
Cosmos inaudito, simbólico y escenificado en un solo grano
de arena.
Tu mirada el sentido mismo de la primavera en un cosmos
desenfrenado.
Inaudito como tu palabra que se emblemática en ese…silencio.
Carne de sueños y piel que enmarcada un cuadro inmaterialmente surrealista.
Así eres tus. Piernas
de mujer y vapor…
Hielo de eternidades impredecibles…
Llena de verdades filosóficas aun tratando de encontrar su sentido lógico y sereno,
Noches de orgasmos
terminablemente interminables,
De pieles ardientes, de ojos sedientos, de soles atiborrados
de helio…
Gas noble que no se desprende de este corazón que se desgaja
por ti…
Que te desea en esta guerra interminable.
En este… holocausto que no deja de sangrarnos…
Que no deja de estar presente en nuestra cama,
En nuestro entorno vital de eternidad y profundidad.
Palabras de senos, de cuerpos, de caderas, de masturbaciones
interminables,
De recorrer tus medias de seda y platinum,
De eternizarme en tu química
y desmigajarme en tu ser.
Amor… detonación inexorable del cosmos.
Magia sutil y sentimental del corazón…
Y la única cosa que puede salvarnos de este….
Holocausto final.
Amor… detonación química de nuestros cuerpos,
Amándose, frotándose, inundándose de ese sudor,
Ardoroso, sediento de vida, sediento de ti.
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